Con obras digitales de fuerte carga simbólica, Carlos “indio” Solari inauguró en La
Plata su muestra “BRUTTO”. La propuesta, que llegó desde Mar del Plata tras haberse exhibido allí, reunió a visitantes que se acercaron para conocer la faceta del artista por fuera de la música, en una jornada marcada por la masiva convocatoria y opiniones diversas.
- * Tadeo Garzaniti
El pasado viernes 5 de septiembre a las 17 horas, el Teatro Argentino de La Plata fue escenario de la inauguración de “BRUTTO”, la muestra de artes visuales del músico y compositor Carlos “indio” Solari. La exposición, de entrada, libre y gratuita, convocó a cientos de visitantes que se acercaron para conocer una faceta menos difundida del exlíder de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, figura central de la cultura popular argentina.
Las obras presentadas corresponden a una serie de producciones digitales que exploran un universo propio, cargado de imágenes oscuras, deformadas y de colores vibrantes. En ellas aparecen cuerpos fragmentados, criaturas híbridas y símbolos que remiten a una estética oscura. La propuesta de BRUTTO es atraer al público conectándolo con un lado del artista que no es la música sino su faceta artística.
La muestra confirma que el cantante no se limita al terreno musical, sino que despliega un lenguaje visual autónomo, aunque vinculado a la misma intensidad que caracteriza sus canciones. En este sentido, muchos de sus seguidores interpretan las pinturas como una extensión de la lírica ricotera, marcada por lo poético, lo enigmático y lo inquietante. El público que visitó la muestra respondió masivamente a la convocatoria.
Entre los asistentes hubo seguidores históricos del indio, que vieron en la exposición una continuidad de su obra. Una platense destacó: “El Indio me acompaña desde la adolescencia hasta la juventud. Sus pinturas me generan muchas emociones, encuentro oscuridad e influencias muy interesantes. Si hubiera sido paga, también habría venido”
También se hicieron presentes vecinos y artistas de la ciudad, que ofrecieron miradas más analíticas. Un platense vinculado a las artes plásticas reflexionó: “El fenómeno del indio es magnético y me atrae, pero también me genera rechazo. Más allá del mito, me interesa su cruce con otras disciplinas, como ya hicieron músicos de su generación”.
El Teatro Argentino aportó un marco simbólico a la jornada. Para muchos asistentes, volver a este espacio cultural de referencia en la ciudad fue tan significativo como la muestra misma. El teatro se convirtió en un lugar de reencuentro con la memoria y en escenario de un acontecimiento cultural que mezcló arte visual, música y convocatoria popular.
La gratuidad del evento fue otro factor destacado. Permitió que tanto seguidores incondicionales como simples curiosos accedieran a una propuesta artística que, de otro modo, podría haberse limitado a un público más reducido. Varios de los presentes subrayaron el valor de que una figura como el Indio Solari apueste a que su obra pueda ser vista sin barreras económicas.
Con “BRUTTO”, Solari reafirma su lugar como artista integral, capaz de expandir su producción más allá de la música y de seguir generando fenómenos de convocatoria masiva. Sus cuadros, cargados de tensión y expresividad, plantean preguntas sobre la estética, la subjetividad y el lugar del arte en la cultura contemporánea.
La muestra permanecerá abierta al público en el Teatro Argentino durante las próximas semanas, consolidándose como uno de los hitos culturales de la temporada en La Plata. En cada visitante, el Indio vuelve a provocar lo que mejor sabe hacer: conmover, interpelar y dejar huella.
